La épica gestacional de la Universidad Tecnológica Nacional, antes Universidad Obrera Nacional, respondía a un modelo productivo centrado en el fortalecimiento de la Industria Nacional y la jerarquización de la formación técnica necesaria para nutrirla. Los sucesivos cambios políticos producidos a lo largo de los años en Argentina y en el mundo, no pudieron abolir el creciente prestigio que la UTN fue adquiriendo a base de trabajo, exigencia y compromiso con la formación profesional de Ingenieros en nuestro país.